Hoy os traemos un post diferente. Queremos mostrar las ventajas que puede tener la informática en los más jóvenes, ya que la tecnología es algo que está muy presente en nuestro día a día: teléfonos móviles, compras online, coches, televisiones, etc. Pero además, no cabe duda de que el uso de las nuevas tecnologías será aún mayor en el futuro.
En el futuro la tecnología jugará un papel fundamental en cada aspecto de nuestras vidas. Por ello, preparar a nuestros hijos con lo que, con certeza, formará parte de cualquier profesión el día de mañana, es sin duda un factor clave para su futuro.
Por ello, enseñar a los niños, no solo a manejarla, sino a que comprendan cómo funciona y a que aprendan a modificarla será una ventaja para ellos. Aprender a programar es una de las herramientas más útiles. No sólo por su carácter tecnológico, sino también por su integración con el campo de las matemáticas y la ciencia. Así, los niños que saben programar desarrollan sus capacidades personales y profesionales, a la vez que se preparan para su futuro.
¿Por qué en la infancia?
El aprendizaje de la programación es más beneficioso en la infancia que en la edad adulta. Los niños tienen mejores cualidades para el aprendizaje que los adultos y, además, al haber nacido en un mundo rodeado de tecnología, están más familiarizados con el manejo de los dispositivos por lo que aprenderán esta habilidad más rápidamente.
Una vez adquieran estos conocimientos tendrán una mayor comprensión sobre el funcionamiento interno de la tecnología que tanto utilizan, por lo que a partir de entonces, ya no solo estarán utilizando los dispositivos electrónicos de una forma superficial, sino que a la vez desarrollarán sus capacidades de lógica y razonamiento.
De hecho, aprendiendo a programar adquirirán una forma de pensar más ordenada y lógica, por lo que mejorarán sus aptitudes académicas, sobre todo en asignaturas como matemáticas o física.
Llegados a este punto, podríamos pensar que algo que plantea tantas ventajas puede suponer un gran esfuerzo para el niño. Sin embargo, resulta todo lo contrario, ya que para ellos aprender a programar es muy divertido. Programar un robot que consiga moverse tal y como le ordenen o construir desde cero un pequeño juego captará tanto el interés del niño que su motivación por seguir aprendiendo se incrementará. Además, la enseñanza de la programación en niños está muy enfocada a la prueba/error, por lo que les ayudará a desarrollar su paciencia y la resolución de problemas, hasta superar cada uno de los retos que se les hayan planteado.
¿Qué capacidades mejoran?
Como ya hemos comentado anteriormente, aprender a programar es una capacidad que le aporta numerosos beneficios a los niños. En concreto, podemos observar como influye en las siguientes habilidades:
Mejora la atención y la concentración, aumentando además la capacidad de retener información momentáneamente, procesarla y dar una respuesta o solución.
Desarrolla la lógica, ya que se acostumbrarán a dividir un problema en pequeñas partes, razonar posibles soluciones, ver las cosas desde diferentes perspectivas y tomar las decisiones más acertadas. Esto les permitirá simplificar los problemas y resolverlos de una forma más eficaz.
Mejoran sus capacidades de planificación y orden. La programación implica ser estructurado e ir paso a paso solucionando cada error que aparezca.
Estimula su creatividad, su imaginación y originalidad, ya que plantea nuevos escenarios en los que pondrán a prueba cada una de estas capacidades.
Mejora la tolerancia a la frustración. Se enfrentarán a errores y fallos para los que la paciencia, la actitud y las ganas de aprender serán fundamentales.
Aprenden sobre electrónica y programación, que como ya hemos comentado, formarán un papel fundamental en el futuro.
Despierta el pensamiento crítico y científico.
Aumentan su capacidad de abstracción mediante procesos de análisis y síntesis.
Fomenta el trabajo en equipo y la colaboración.
Aumenta su autoestima, creando oportunidades de superación y autoconocimiento personal positivo.
Practican el inglés de forma natural, ya que la programación se estudia y trabaja en este idioma.
Conclusión
Con las numerosas ventajas y beneficios que aporta, cada vez son más los padres que deciden apuntar a sus hijos a talleres o extraescolares de programación y robótica. Ni que decir tiene que no necesitan mucho esfuerzo para convencerles de asistir a estas clases. Incluso podría considerarse adecuado introducir algunas de estas materias y conocimientos dentro del currículo general del aula.
No es extraño pensar que esto llegue a ocurrir en un futuro cercano, ya que el lenguaje más internacional usado en todo el mundo no es ni el chino, ni el inglés… sino la programación.
Esperamos que os haya resultado interesante el artículo, y que os haya proporcionado una visión positiva del buen uso que se le puede dar a la tecnología. Puedes seguir nuestras próximas publicaciones suscribiéndote a nuestro boletín de noticias.